Abstract:
La cosmovisión aimara de la crianza de alpacas y llamas, comprende un enfoque desde el ayllu hacia la realidad actual o hacia afuera, donde uno de los ejes transversales es el tiempo, por lo tanto el tiempo es imprevisible, para el hombre andino no hay una distinción tajante y cancelatoria entre el pasado y futuro, porque el presente los contiene a ambos. Las nociones de secuencia de antes y después, existen no como oposición al pasado y futuro, sino que se encuentran albergados en el presente. Porque, en este ámbito se realiza la convivencia entre diferentes colectividades, cuando el sacerdote andino ve en su ritual, el pasado lejano funcionando y participa de él, como también conversa y ve el futuro y predice, el clima de la campaña ganadera venidera. En la cosmovisión aimara agrocéntrica, la lógica de convivencia se da en criar y dejarse criar, porque los excesos desequilibran la armonía, todos cuanto existen en este mundo animal, son vivos y vivificantes. La vida en austeridad es una virtud, que se opone a todo desperdicio y todo exceso que lastima a la armonía propia de la vida. La muerte es parte del proceso de la vida y constituye a la dinamicidad, al flujo continuo de la vida de unas formas a otras. La concepción andina es holística; en este mundo comunitario no cabe exclusión alguna, es un mundo embebido de sentimiento de pertenencia y pertinencia a una comunidad. Para los habitantes de las comunidades de la zona alta de los distritos de Pichacani - Laraqueri, la crianza de alpacas y llamas; es la manera como esta actividad viene a constituir el centro de atención máxima para garantizar la subsistencia y para generar mayor vida dentro de la colectividad natural.