Abstract:
Esta investigación presenta el análisis de las opiniones de los padres de familia quechuahablantes del departamento de Puno, en tres temas importantes relacionados con la educación bilingüe intercultural (EBI): el uso de la lengua materna quechua en las escuelas donde se aplica la EBI; la lealtad del quechuahablante a su lengua materna y la información que tienen sobre la EBI, sus ventajas y los motivos por los cuales esta modalidad educativa utiliza la lengua quechua en la escuela. En los inicios de la década del 80, la utilización del quechua, la lengua materna de los niños, como una de las lenguas de instrucción en las escuelas EBI, generó opiniones y actitudes desfavorables de los padres de familia hacia ésta modalidad educativa. El problema se manifestó en el temor de los padres de familia, por el aprendizaje del castellano y el futuro escolar de sus hijos. Sin embargo, después de 20 años de la utilización del quechua en las escuelas EBI, las opiniones de los padres de familia, están cambiando. En la actualidad no quieren que sus hijos aprendan sólo el castellano en la escuela, por el contrario, su interés mayoritario se orienta por el aprendizaje del quechua (como lengua materna) y del castellano (como segunda lengua) a la vez, a fin de satisfacer las múltiples necesidades de carácter comunicativo y educativo de sus hijos. En el mismo sentido, la actitud desfavorable de los padres de familia hacia el uso del quechua en las escuelas EBI, también está cambiando sustancialmente a favor de su utilización. Las puntuaciones por debajo de la línea de indiferencia de los componentes cognoscitivo y conductual de la actitud investigados, confirman esta tendencia. En relación a la lealtad lingüística, esta investigación demuestra que los quechuahablantes tienen una gran lealtad a su lengua materna, la misma que se manifiesta en las opiniones contrarias a la desaparición del quechua, que se fundamenta en el gran número de hablantes, la lengua recibida como herencia de los abuelos y su importancia para la comunicación entre comuneros y familiares, dentro de la comunidad campesina. Asimismo, los quechuahablantes no tienen vergüenza de hablar su lengua materna. Por el contrario, se enorgullecen de ella, salvo en el contexto de identifican y se la ciudad, donde el castellanohablante urbano no aprendió a respetar a la lengua quechua ni a sus hablantes. Los quechuahablantes también precisan que su lengua tiene utilidad para el proceso de interacción social y mejor comprensión de los mensajes entre comuneros y familiares. Finalmente, en relación a la información que tienen los padres de familia sobre la EBI, sus ventajas y los motivos por los cuales se utiliza la lengua quechua en la EBI, la opinión mayoritaria de los padres de familia, confirmó que no están bien informados sobre estos tres aspectos. Esta situación es producto de la desinformación sobre las bondades de la EBI a nivel de los pobladores que habitan en las comunidades campesinas, como responsabilidad de las instituciones educativas encargadas de su implementación.