Abstract:
En la presente investigación, se estima la evolución del retorno a la educación 2007 – 2018. Se usó la metodología de mincer y para corregir problemas de endogeneidad, se emplearon variables instrumentales. Los resultados confirman que el retorno esperado de un año adicional de escolaridad aumenta el salario en 7.3% y la experiencia en 3.2%. Los retornos incrementan en 12.1% y 14% al instrumentar la escolaridad (Padre Joven) y al utilizar dos instrumentos (Padre Joven y Discapacidad), los retornos alcanzan 25.4% (2016) y 30.3% (2017). Por otro lado, los resultados sugieren que los padres a temprana edad tienen penalidad del 13% (25 años) y 16.2% (23 años) en sus ingresos laborales, debido a los impactos negativos en los niveles de escolaridad (-263%). Los resultados estimados con discapacidad implican penalización del 23% en promedio sobre los ingresos laborales, en relación con los que no son, para impedimentos de caminar (24%), ver (11.3%) y oír (19.3%). La penalidad es estadísticamente significativa sobre los ingresos laborales, también evidencian menores niveles de escolaridad en comparación con los no discapacitados, en mayor magnitud en los períodos 2016 (-23.4%) y 2017 (-26.4%). Se concluye que, la prevalencia de la paternidad temprana y discapacidad, evidencian menores niveles de escolaridad, por consiguiente, menores ingresos laborales. Estos eventos se producen en un momento crítico de la vida que interrumpen la formación del capital humano por las posibles barreras institucionales en las instituciones educativas.