Abstract:
Niveles altos de concentración de metales pesados en aguas que son utilizadas para consumo de la población, el riego y la actividad pecuaria representan un serio problema para la salud humana, la agricultura, biodiversidad y medio ambiente en general. La contaminación de medios acuáticos por metales pesados es una de las mayores preocupaciones en las localidades rurales y ciudades urbanas de los países en vías de desarrollo, este problema es latente en la subcuenca del rio Llallimayo, superficie hidrográfica que alberga a una población estimada de 18,300 habitantes expuestas a los efectos de una cantidad alta de metales tóxicos los cuales se traducirían en gravedad para la salud humana hasta el riesgo de mortandad si, los niveles de metales pesados exceden los límites de tolerancia en el cuerpo receptor; por lo que la presencia de metales pesados en el rio Chacapalca es un riesgo latente para la salud humana. En la sub cuenca del rio Llallimayo aguas arriba se encuentra la mina Aruntani actualmente en operación, plan de cierre de mina y aún descarga sus efluentes mineros al rio Chacapalca, lo que ha generado que los niveles de metales pesados excedan las normas de calidad del agua confiriéndole características de toxicidad a las aguas superficiales de la subcuenca Llallimayo ocasionado por la intensa actividad de la Mina Aruntani. El estudio se llevó a cabo durante los meses de octubre 2020 a mayo del año 2021, épocas de avenida y estiaje, se evaluaron parámetros “in situ” en dos puntos estratégicos y tomaron muestras aguas arriba y abajo del rio Chacapalca, analizándose en laboratorio por el método EPA de espectroscopia de absorción atómica los parámetros fisicoquímicos, inorgánicos y microbiológicos, como el potencial hidrógeno (pH), la temperatura (°C), la conductividad eléctrica (CE), metales pesados totales: Aluminio (Al), arsénico (As), cadmio (Cd), cobre (Cu), manganeso (Mn), mercurio (Hg), plomo (Pb) y coliformes termotolerantes. Las correlaciones entre los puntos de muestreo variaron en las diferentes zonas del estudio, muy significativas para los parámetros inorgánicos; concluyendo que, la descarga del efluente minero contamina gravemente y llevan a sobrepasar los límites permisibles para Al, As, Cu, Fe, Mn y Zn en agua para uso y consumo humano.